Ir al psicólogo :“Yo no… ¿Tú sí?”
Nos resulta absurdo imaginar que alguien deba avergonzarse por lastimarse la pierna trabajando o haciendo deporte y tenga que ir al médico, pero no nos sorprende que alguien pueda sentir vergüenza por ir al psicólogo. No nos importa que la gente sepa que tenemos una fractura en la tibia, pero no admitiríamos que se enterasen…